En el interior de la Provenza, en pleno Parque Natural de Luberon y colgando de un otero de 370 metros encontramos Gordes, el pueblo más bonito de la región. La imagen al acercarnos es impactante, de postal.
Gordes, el pueblo más bonito de la Provenza
La Provenza francesa es un destino genial para hacer una ruta en coche (puedes alquilar aquí). Una buena opción es volar hasta Marsella y perderte por sus campos de lavanda con reminiscencias a mar.
Gordes es un pequeño municipio que puede visitarse en apenas una mañana, pero que si tienes tiempo, puedes usarlo de campamento base para explorar la zona. Nosotros dormimos en su camping, pero tiene alojamientos tan bonitos como este (vas a flipar con cómo es y las vistas que tiene).
Rincones románticos en la Provenza francesa
Qué ver en Gordes, el pueblo más bello de la Provenza
Este precioso macizo donde la roca de las casas y la montaña se han hecho uno es un lugar con mucho encanto. Desde lejos, se ve austero y algo rústico con su piedra clara y sus tejados terracota, pero al adentrarnos en sus serpenteantes calles, nos embriaga de su encanto y sus detalles. Lo principal que ver en Gordes es su castillo y su iglesia, pero relájate porque es un rincón para disfrutar de las cosas más simples (como comerse un crêpe).
Qué bonito es Gordes en Francia
Históricamente tiene orígenes romanos, aunque su peculiar localización es fruto de posteriores invasiones y ataques de mercenarios en la zona, que obligó a los locales a instalarse en áreas muy escarpadas y fortificadas de difícil acceso. Es un enclave que ha atraído a muchos artistas como el pintor flamenco Pol Mara, que tiene su propio museo (no muy lejos queda Mougins, el pueblo que encandiló a Picasso). De hecho, durante mi visita había una exposición muy chula al aire libre.
Exposición al aire libre en la Provenza
Monumentos principales que visitar
El castillo medieval de Gordes
En varias crónicas aparece menciones a esta fortaleza desde el siglo XI. No obstante, se sabe con certeza que se reconstruyó en el XVI por Bertrand Rambaus Simiane. Es de planta rectangular, muy estrecho y en los laterales cuenta con dos torres con matacanes. Es muy curiosa la diferencia estética de sus dos fachadas: la norte parece que no la tocó demasiado; sin embargo la sur, no se sabe si estaría más deteriorada o fue un simple capricho pero se asemeja más a un palacio que a un castillo. Septentrional defensiva versus meridional elegante.
En la actualidad es el ayuntamiento y también alberga un museo. La chimenea renacentista de uno de sus salones es una pasada.
Castillo de Gordes
La Iglesia de San Fermín
San Fermín, patrón de Gordes, tiene dedicada a él una bella iglesia. En un principio era románica, pero poco queda de ello tras una remodelación en el siglo XVIII. Por dentro es una explosión de color, que contrasta con esa idea tan austera y sobria del románico primigenio. La capilla de San Eloy está dedicada a los herreros y cerrajeros, mientras que la de San Crespín lo hace a los zapateros.
En la Rue des Clastres podemos encontrar tallada en la piedra una concha de buen augurio para los peregrinos de camino a Santiago de Compostela.
Iglesia del pueblo junto a la de San Firmin
Otras cosas interesantes en los alrededores
Visita también el Moulin des Bouillons, dicen que es el molino de aceite más antiguo del mundo y uno de los iconos de Gordes.
No te pierdas la Abadía de Sénanque, situada entre campos de lavanda. Data del siglo XII y está habitada por una comunidad de monjes cistercenses que producen miel, aceites esenciales y licor.
No pierdas la ocasión tampoco de visitar algunos mercados cercanos, o las propias tiendas de productos locales que tiene la localidad, ¡me encantan este tipo de comercios tradicionales! ¿A ti no?
Tiendas artesanales en los pueblos de Francia
¿Te he convencido ya de que Gordes es uno de los tops de la Provenza? Pues no te pierdas esta ruta por los pueblos más bonitas del sur de Francia.