Ruta por los castillos de Escocia: a lo William Wallace

La milenaria Escocia tiene su historia grabada en piedra: en la roca de las tumbas de sus clanes semiocultas por la hierba de espíritu libre en cementerios, en las incontables cruces celtas que te asaltan a cada paso no importa si es ciudad o pueblo, y sobre todo, en los cantos de los más de tres mil castillos con los que ha llegado a contar y de los que aún se conservan al menos mil. Traiciones, amoríos, guerras, nacimientos, torturas, festines, fantasmas… todo ha pasado a un lado y otro de sus gruesos muros; verdades y mentiras de vidas que merecen ser contadas en esta ruta por los castillos de Escocia. Las fortalezas más impresionantes que visitar.

Recorrer los mil castillos sería prácticamente imposible, pero he hecho una lista con los castillos de Escocia imprescindibles que ver en un viaje hasta sus Tierras Altas.

Si quieres saber cómo he organizado yo mi viaje en coche por Escocia e Inglaterra tienes que leer mi experiencia. Seguro que te ayuda a preparar tu itinerario.

Cuáles son los castillos de Escocia más importantes que visitar: mi ruta en coche

1. Castillo de Dunvegan, un retiro idílico en la Isla de Skye

Un road trip por la mágica isla de Skye es trasladarte por completo al mundo celta, una de mis experiencias preferidas en Escocia sin duda. Desde las Piscinas de las Hadas, a sus temidos passing places, la bruma en sus montañas y acantilados o las «simpáticas» gaviotas de Portree (te aconsejo no comer nada en su presencia); no hay rincón que no merezca la pena. En cuanto a castillos, destaca el caserón de Dunvengan. Tiene unos jardines llenos de flores que te embriagarán sin duda.

2. Castillo de Elian Donan, el mejor castillo que ver en Escocia

Casi como un espejismo, el castillo más famoso de Escocia emerge de las algas y aguas en las que confluyen los lagos Duich, Alsh y Long sobre la pequeña Isla de Donan. Tan sólo cruzando un puente (de piedra) podrás acercarte a la pequeña elian que cobija la fortaleza de Donan, y de esta forma, ser partícipe de su historia permitiéndote regresar a otra época.

La composición crea una imagen espectacular, absolutamente fantasmagórica, tanto de día como de noche. El castillo ha sido filmado en numerosas películas, como Baveheart o Los Inmortales, y constituye sin duda un must en cualquier ruta por las Highlands que se precie.

3. Castillo de Urquhart, una fortaleza en ruinas en el Lago Ness

Junto a la villa de Drumnadrochit, a orillas del Lago Ness, descansan las ruinas de Urquhart, uno de los castillos más bonitos de Escocia. Se conoce que en el siglo VI, San Columba en su carrera por la cristianización ya anotó la reminiscencia de una casa situada en ese preciso lugar, aunque la fortaleza como hoy la apreciamos (bueno, en mejores condiciones) data seguramente del siglo XIII, habiendo pertenecido a la familia Dunward. Fue destruido en 1692 por los ingleses para evitar que fuese tomado por los jacobitas y por eso sólo se conserva en decadencia. Pero no por ello es menos impactante, pues el cómo la naturaleza lo va devorando es un recuerdo fascinante.

Tienes que subir a la terraza de la Grant Tower a apreciar su mirador. Dicen que con un poco de suerte puedes ver a Nessy.

4. Castillo de Inverness, una ciudad que inspira a los fans de Outlander

Este castillo escocés es relativamente moderno, pues se construyó en el siglo XIX, y está elaborado en arenisca roja. En la actualidad se utiliza como oficinas del gobierno local, pero en temporada alta se abre al público, permitiéndose el acceso a determinadas exposiciones sobre el palacio. Tiene unos jardines muy bonitos con buenas perspectivas del río Ness.

5. Castillo de Blair, ¡todo al blanco!

Impone su impoluto color blanco con pequeños tejados en negro que creerás inspiran a algún diseño de la compañía Disney. El Castillo de Blair es propiedad de los Duques de Athol y se empezó a construir en el siglo XIII. La visita al interior de sus dependencias es muy interesante porque permite el acceso a numerosas estancias de esta casa palaciega, con salones que parecen a punto de recibir invitados en un rimbombante evento social, habitaciones de ensueño y altos doseles, chimeneas y juegos del té, además de un gran salón de baile.

La fortaleza es sede de los Athol Highlanders, el único ejército privado de Reino Unido. En sus puertas suele haber un escocés ataviado con kilt, sporran y chaqueta Argyll tocando la gaita, ¿se le puede pedir más a esta ruta por los castillos de Escocia? Pues encima tiene en sus jardines una manada de bisontes escoceses.

6. Castillo de Stirling, un sueño pasado por agua

El escaso (llegamos justo en el cierre) y mal tiempo impidió que pudiera acceder al castillo de Stirling, pese a que la incesante lluvia sólo pedía protección si no amaino y estábamos a sus puertas. Situado en lo alto de una colina, esta fortaleza está escoltada por tres vertiginosos acantilados. Las distintas construcciones que lo componen tienen fechas diversas, que recorren los siglos XIV, XV y XVI. Durante el asalto del rey Eduardo I en la Guerra por la Independencia de Escocia se utilizó como defensa en este punto el «Warwolf», el mayor fundíbulo (lanza piedras) jamás construido.

Desde Edimburgo puedes ir a Stirling contratando esta excursión si no tienes coche. Es uno de los castillos más emblemáticos de Escocia, así que no te lo pierdas. Si vas por libre, te aconsejo esta visita guiada.

7. Castillo de Edimburgo, la guinda del pastel en una ciudad maravillosa

Ancorado en la colina Castle Rock, el majestuoso Castillo de Edimburgo domina la capital de Escocia. Aunque es cierto que en su interior la mayoría de edificaciones están dedicadas a diversos museos militares, creo que sería un crimen irse sin dedicarle unas horas. Intramuros se guardan las joyas de Escocia, varias prisiones (iban en función de la condición social), una capilla que constituye el edificio más antiguo de la ciudad, y un cañón que cada día a la una se pone en funcionamiento para sorpresa de sus visitantes. Una pasada.

Es la atracción de pago más visitada de Escocia así que las colas son interminables. Por eso, creo que lo mejor es ir con los tickets comprados de casa, en este enlace podéis conseguir entradas al Castillo de Edimburgo y evitar esperar colas.

Y ya que estamos, os dejo por aquí mi guía con los imprescindibles que ver en Edimburgo, aunque como siempre recomiendo, lo mejor es empezas haciendo un free tour en español… ¡es gratis!

En Edimburgo también encontramos el Palacio de Holyrood, la residencia oficial de la Reina de Inglaterra en Escocia. Un lugar lleno de misterio e historias. Reserva tu entrada aquí.

Otros castillos bonitos de Escocia, ¡no te pierdas ni uno!

• Si como a mí te encanta Outlander, tienes que hacer esta excursión por los escenarios desde Edimburgo. Conocerás Lallybroch, el Castillo Blackness, el Palacio Linlithgow o el Castillo Doune.

• Cambiamos de tercio, ¡es que también soy muy fan de Harry Potter! Con esta excursión de un día podrás descubrir los castillos ingleses desde Edimburgo que inspiraron a la saga.

• Dos castillos muy interesantes para ver en una jornada son los de Glamis y Dunnottar (donde Macbeth asesinó al rey Duncan). Puedes ir por libre o con esta excursión con guía.

• El de Balmoral es otro de los castillos más importantes de Escocia, residencia de verano de la familia Real Británica. Reserva tu plaza.

• Con esta excursión al precioso Castillo Fraser podrás visitar también una destilería de whisky escocés. Mola, ¿no?

Bueno, pues estos son mis castillos imprescindibles en una ruta por Escocia. Eso sí, teniendo en cuenta que hay mil, si el país fuese un desayuno escocés, con estas fortalezas sólo habrás mordido el haggis. Apenas habrás probado una parte del plato, pero su sabroso y genuino sabor a Escocia te dejará satisfecho hasta tu próximo viaje.

Para que sigáis entrando en el ambiente del misterio celta, os dejo un puñado de historias de miedo ambientadas en Escocia.