Si tienes planeado visitar la capital mexicana, hoy quiero contarte un puñado de excursiones desde Ciudad de México que puedes hacer en un día (aunque en algunos lugares merece la pena quedarse), para que explores a tope los alrededores, ya que hay muchas cosas interesantes que ver cerca de CDMX.
Lógicamente, no puedo empezar a contar qué visitar en las cercanías sin dejarte mi guía de Ciudad de México con todos los monumentos principales y otros lugares más alternativos. Y obviamente mi lista con los mejores sitios donde comer en CDMX, desde tacos a citas románticas.
Qué ver cerca de Ciudad de México
Sin entrar a hablar de otras zonas maravillosas de México tipo Quintana Roo (Playa del Carmen, Cozumel, Isla Mujeres, Holbox…) o Yucatán (Mérida, Izamal, Valladolid…), de las que me declaro muy fan, hay localizaciones muy cerca de Ciudad de México que son la excusa perfecta para estirar un viaje a la metrópoli. Algunas de mis escapadas y tours preferidos son:
Pirámides de Teotihuacán
Uno de los enclaves principales que ver en los alrededores de Ciudad de México son las Pirámides de Teotihuacán, situadas a tan solo 50 kilómetros. Cuando los mexicas llegaron a este lugar encontraron ya templos construidos, así que incluso en la actualidad se desconoce con certeza su origen.
Son las ruinas arqueológicas más visitadas de todo el país (aunque Chichen Itzá sea tan conocida) y el tamaño de los Templos del Sol y la Luna son abrumadores, así como lo es la llamada Avenida de los Muertos, que los une.
Y son muchos otros los puntos que se recorren. Por mencionar: la Ciudadela, con la Gran Plaza y el Templo de Quetzalcóatl, el Palacio de Quetzalpapálotl donde vivía la clase alta, el Palacio de los Jaguares, el Templo de los Caracoles Emplumados y el espacio museo.
Conviene ir temprano para evitar a la gente y al calor, y la forma más cómoda es con esta excursión. Yo agradecí ir con guía porque realmente merece la pena conocer la historia de este sitio.
Nosotros teníamos planeado sobrevolar las pirámides con un globo aerostático. Tiene que ser una experiencia fascinante, aunque lamentablemente el tiempo no nos acompañó en esa mañana y tuvimos que cancelarlo. Si quieres darme envidia, reserva tú aquí.
Puebla
La localidad de Puebla se encuentra a un par de horas del centro de Ciudad de México (hacia el sur). Esta belleza conocida por su cerámica de Talavera, esconde muchos otros lugares interesantes.
Desde la leyenda del Callejón de los Sapos, a su Calle de los Dulces, pasando por su Catedral y sin duda probando algunos de sus platos típicos, como las cemitas o el chile poblano. Merece muchísimo la pena y es muy colorida.
Tiene tantos rincones interesantes que he escrito una guía completa con todas las cosas chulas que ver y que hacer en Puebla (y por supuesto dónde comer), así que no te lo pierdas.
Personalmente creo que Puebla tiene tanto encanto que merece la pena quedarse a pasar en ella al menos una noche. Nosotros lo hicimos así y escogimos esta brutalidad de hotel boutique en una casona absolutamente perfecto.
Si prefieres ir a Puebla desde Ciudad de México a pasar el día, lo más recomendable es esta excursión, que además incluye Cholula (de la que ahora te hablo) y Tonanzintla.
Cholula
Muy cerca de Puebla tenemos Cholula, lugar al que conviene desplazarse para conocer su zona arqueológica. Aquí encontramos una gran pirámide cubierta de hierba que nunca ha sido excavada para no alterar el gran templo cristiano que se erigió posteriormente en su cima. Alucinante, eh.
Para ir a Cholula desde Puebla lo más fácil es reservar plaza en esta excursión que te lleva y te traer por muy poco dinero. Es muy cómodo y barato.
Querétaro
Ya con dirección claramente norte, a unas dos horas y media de Ciudad de México encontramos una parada perfecta para aquellos que se aventuran hacia San Miguel de Allende (de la que más abajo hablaré).
Querétaro es una ciudad coqueta, con varias zonas peatonales y grandes plazas. Hay restaurantes y cafeterías adorables por todas partes, terrazas con vistas donde tomar un cóctel y mercaditos callejeros que invitan a la exploración relajada.
Uno de sus enclaves principales es el árbol del Templo de la Cruz, que cuando se acerca la Semana Santa provoca la salida de unas ramitas que literalmente parecen espinas como las de Cristo. Dicen que es un milagro.
Nosotros nos quedamos una noche en Querétaro para cenar tranquilamente y hacer un par de excursiones al día siguiente (que también pueden hacerse directamente desde CDMX). Dormimos en un palacete muy particular.
En general Querétaro me sorprendió y me gustó un montón, y la usé de base para conocer Bernal y las bodegas de Freixenet en México.
Bernal
Una auténtica desconocida para mí y una de mis grandes favoritas que ver cerca de Ciudad de México.
Bernal es un bello Pueblo Mágico de México (aquí tienes la lista) cuyo estandarte es un gran monolito (uno de los más grandes del mundo junto con el Peñón de Gibraltar entre otros, con sus 2.150 metros de altura). Esta mole acompaña visualmente el recorrido de muchas de las empedradas calles multicolor del centro, animadísimas, repletas de tiendas y taquerías. Muy top.
Si te ha molado y quieres ir, sigue leyendo el siguiente punto que va muy hilado a Bernal.
Bodegas Freixenet
Antes de empezar a preparar mi viaje a Ciudad de México y alrededores no tenía ni idea de que Freixenet, la famosa marca española de cava, tenía bodegas en esta zona de México, muy cerca de Bernal.
Resulta que hace tiempo se llevaron algunas cepas y empezaron a cosecharlas allí, ya que tienen un clima relativamente parecido, y se ha continuado elaborando cava allí.
La bodega es muy moderna y bonita, y hacen tours guiados por su cava (a 25 metros de profundidad), te cuentan muchas curiosidades, su historia, y por supuesto tiene una cata final para testear el producto.
Si te apasiona el mundo del vino como a mí, te recomiendo absolutamente esta excursión desde Ciudad de México. Puedes reservar tu plaza aquí y combinarla con la recién mencionada Bernal.
San Miguel de Allende
Creo que San Miguel de Allende se presenta sola, pero bueno, he dejado lo mejor para el final. Si solo puedes hacer una excursión desde Ciudad de México, esta sería la elegida. Es la más alejada (3 horas y media) pero la más espectacular.
Este pueblo es simplemente fantástico. Su casco histórico es uno de los más bonitos de todo México, con sus iglesias, sus tiendas de artesanía, sus jardines y su hermoso mirador. Es pequeñito, pero creo que hay dedicarle un tiempo a recorrer sus callejas sin prisa y probar varios de sus magníficos restaurantes.
Aquí te dejo mi guía con todos los lugares que recomiendo descubrir en San Miguel de Allende, además de un puñado de sitios para comer que no te dejarán indiferente.
Como ya he dicho, creo que lo suyo es quedarse al menos una noche a dormir. A nosotros nos moló tanto que nos quedamos dos, y lo hicimos en este palacete histórico, uno de los hoteles más chulos que puedas imaginar, que de hecho alberga un restaurante muy aclamado por los visitantes.
Otras de las mejores excursiones desde Ciudad de México de un día
– Ex-Hacienda de Chautla + Santuario de Luciérnagas. Reserva aquí.
– Grutas de Tolantongo. Unos baños termales preciosos en terrazas. Reserva aquí.
– Taxco (con visita a las minas prehispánicas) y Cuernavaca. Reserva aquí.
– Valle de Bravo + Santuario de la mariposa monarca. Reserva aquí.
– Si viajas a México en Navidad, tienes que ir a Chignahuapan y Zacatlán de las Manzanas. Reserva aquí con taller de bolas navideñas.
Estas son algunas de las mejores excursiones desde Ciudad de México de un día (o más) si quieres explorar los alrededores, cosa que merece muchísimo la pena.