El Golden Circle es una de las paradas esenciales en cualquier ruta por Islandia que se precie. Reúne algunas de las cosas más importantes que visitar en el país y hay mucho que ver en el Círculo Dorado. Pero, ¿Qué es el Círculo Dorado realmente? ¿Dónde se ubica? En este post encontrarás una guía perfecta para organizar el recorrido por tu cuenta. Eso sí, también puedes contratar una excursión desde Reikiavik si no tienes vehículo alquilado.
El Círculo Dorado es una ruta turística de unos 300 kilómetros situada en el sur de la isla. Acapara varios de los enclaves más importantes que ver en Islandia y destaca por su cercanía a la capital Reikiavik, a apenas 50 kilómetros. Sus elementos más reseñables pueden recorrerse en una jornada, pero si tienes un par de días para explorarlos, merece la pena.

En este post voy a contaros cuáles son las tres visitas más importantes del Círculo Dorado, las que no pueden faltar (Parque Nacional de Thingvellir, géiseres y cascada Gullfoss) y además quiero añadir un puñado de lugares extra para que corones tu día.

Como siempre, aprovecho para recordarte que por favor vayas siempre con seguro de viaje. Cualquier accidente tonto puede sorprendernos en un país que no es el nuestro y el saber a quién acudir rápidamente tranquiliza mucho. En esta ruta yo reservé la póliza Cap Trip con Chapka (si reservas desde este enlace tienes un 7% de descuento).
Top 3 de cosas más importantes que ver en el Círculo Dorado
De todo lo que hay que visitar en una ruta por el Círculo Dorado de Islandia, hay tres sitios con los que hay que cumplir a rajatabla (pero no son los únicos top para mi gusto). Allá va el mejor itinerario de un día por el Círculo Dorado:
Parque Nacional de Thingvellir (UNESCO)
El Parque Nacional de Thingvellir es la visita del Círculo Dorado que más tiempo te llevará. En mi caso estuve dos horas largas recorriendo sus pasaleras.
Protegido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, esta atracción islandesa tiene mucho que ofrecer. Después de aparcar en uno de sus múltiples parkings de pago (yo lo dejé en el del Centro de Visitantes; y se abona en máquinas – para todos los pagos en el viaje utilicé esta tarjeta monedero comodísima), solo tienes que dejarte llevar por los senderos de tierra y caminos de tablas de madera para ir descubriendo todo lo que tiene que ofrecer.

– Estar entre dos continentes en Thingvellir
Este parque se localiza en torno al Lago de Thingvellir, el más grande de Islandia. Pero si por algo es llamativo este lugar es por encontrarse justo en la grieta que conforman la placa tectónica Norteamericana y la Euroasíatica (que por cierto, se separan unos 2 centímetros cada año). Puedes decir que estás justo entre dos continentes.

– La Roca del Rey
Otro punto icónico de Thingvellir es el montículo conocido como «Roca del Rey», en el que un representante de cada uno de los 30 grupos que formaban los vikingos en el siglo X decidieron asentarse y convocar una especie de Parlamento en el que debatir asuntos de interés, dando lugar así a una de las primeras democracias de la historia. Aquí podemos observar la bandera islandesa ondeando, pero lo verdaderamente interesante es que Thingvellir significa precisamente «explanada de la asamblea».
– Falla Silfra
Mi enclave favorito en este punto del Círculo Dorado sin embargo es la falla Silfra, otra grieta impecable entre placas, esta vez cubierta de agua, que permite una visibilidad perfecta de hasta cien metros de profundidad. Es por ello que se ha considera uno de los emplazamientos más únicos del planeta para hacer snorkel y buceo. Si te apetece puedes echar un ojo a los precios de la actividad aquí, y no te creas que se pasa tanto frío. El agua está a unos 2ºC pero los neoprenos son muy resistentes (o eso me dijeron unos chicos desde el agua).

– Cascada Oxárafoss y más
Otros imperdibles son la cascada de Oxárafoss o la iglesia del lago (fijaos en el río, tiene las truchas más grandes del mundo). Si prestáis atención al paisaje, tramos de campos de lava recubiertos de musgo, hierba… encontraréis la similitud con el camino que llevaba al Nido de Águilas en Juego de Tronos. Porque sí, estaba grabado aquí.

La maravilla de ver géiseres en acción en al Valle de Haukadalur
Una de las cosas más asombrosas que ver en el Círculo Dorado es un géiser en acción en directo. Esto es posible en el Valle de Haukadalur. El chorro de agua a propulsión situado en este punto que dio nombre al fenómeno geológico es Geysir, que aunque llegó a disparar agua a más de 120 metros en el pasado, hace años que permanece aletargado.
El que sí que flipa a todos los visitantes es su vecino Strokkur, que si bien no es tan imponente como Geysir, lanza chorros cada 5 minutos de hasta 20 metros de altura para asombro de los visitantes. Es increíble. No sé cuánto tiempo nos quedamos porque mi padre quería verlo «otra veeeez, otra veeez«.

Como curiosidad, señalar que un géiser no deja de ser una fuente geotermal intermitente que propulsa agua hacia arriba. Para que esto ocurra tienen que darse 3 circunstancias: 1. Tener una fuente de calor próxima (magma calentando el agua hasta ebullición). 2. Que exista una corriente de agua subterránea (en este caso por deshielo del glaciar). Y 3. Que se creen conductos subterráneos acompañados de respiraderos por los que salir a superficie. Voilà.

Nosotros estábamos viajando en autocaravana y furgoneta por Islandia así que aprovechamos el parking enorme con muchas facilidades para hacer una pausa para el almuerzo.
Gullfoss, una de las cascadas más impresionantes de Islandia
El espectáculo sonoro y visual que ofrece la cascada de Gullfoss quedará imborrable para siempre en mi memoria. Después de tantos días viendo cascadas (aquí las que más me gustaron), Islandia una vez más consiguió sorprenderme.
La Cascada Dorada (Gullfoss) es un salto de agua a dos niveles que suman un total de más de 30 metros de estruendosa caída en un cañón absolutamente fascinante. Si vas en un día claro podrás admirar fácilmente el arcoíris que se cuela en la escena, haciéndola todavía más memorable. Es una parada clave que hacer en el Círculo Dorado.
Sus aguas provienen del deshielo del glaciar Langjökull, en el curso del río Hvíta. Hay dos senderos bien trazados para disfrutar de la panorámica desde diferentes perspectivas.

Otros lugares increíbles que visitar en el Círculo Dorado de Islandia
– Cascada de Bruarfoss: no sale en muchas guías y esta cascada destaca por el tono azulado turquesa que adquieren sus aguas. Para visitarla hay que aparcar el coche en una explanada y caminar 45 minutos paseando por la orilla del río Brúará (antes eran apenas 5 minutos pero es territorio privado y han acotado el acceso). Se piden 3 euros.
– Cráter de Kerid: la sensación de estar caminando sobre la cima de un volcán es algo que he experimentado en varias ocasiones últimamente y es muy especial. En el caso de Kerid, que tiene una acústica ideal, el cráter perfectamente ondulado adquiere mil tonalidades entre naranjas, ocres, verdes… y remata su característico paisaje de otro planeta con un fondo cubierto por un lago de color aguamarina oscuro. Hay dos caminos para acercase, uno que lo bordea y otro que se adentra al fondo. Hay que abonar una pequeña cantidad.

– La Laguna Secreta: la Secret Lagoon es uno de los mejores balnearios de Islandia. Tiene la piscina al aire libre más antigua del país, súper calentita (entre 38-40 grados) y está rodeada por un entorno natural muy agradable, incluso hay al lado un pequeño géiser activo. Lo que más me gusta es que lugareños y extranjeros se mezclan en sus aguas haciéndola muy auténtica. Y es más barata que otras de más renombre a pesar de ser las mejores termas del Círculo Dorado. Te recomiendo llevar tu entrada de antemano, puedes reservar aquí tu pase a la Laguna Secreta de Fludir.
Cerca están también las Termas de Fontana, pero para mi gusto son más modernas y no tienen el encanto de la Secret Lagoon.

– Glaciar Langjökull: es el segundo más grande de la isla después del de Vatnajökull. Se pueden hacer excursiones desde la cafetería de Gullfoss que incluyen visita a la cueva de hielo Húsafell, que a pesar de ser artificial (se construyó en 2015) no deja de ser impresionante.
– Aldea ecológica de Solhéimar: un micropueblo sostenible de apenas 100 habitantes que viven desconectados de la red eléctrica (se nutren de la energía geotérmica) y que trabajan cada día en la sostenibilidad. Curioso.
– Catedral de Kaltholt: una iglesia llamativa erigida entre 1956 y 1963.
Y hasta aquí los imprescindibles que ver en el Círculo Dorado de Islandia. El sur tiene muchísimas cosas interesantes que visitar. ¿Te animas con todas?