Como muchos sabéis he vuelto a Irlanda hace poco, y concretamente a mi amada ciudad. Pero esta vez mi alojamiento en Galway no ha sido mi coqueto hogar de Dominick Street sino el Hotel Imperial, en el que igualmente me sentí como en casa.
La mejor ubicación para un alojamiento en Galway
El Hotel Imperial tiene una ubicación inmejorable; está estratégicamente situado en Eyre Square, la plaza principal de la ciudad. A un par de pasos de Shop Street, sólo hay que salir del hotel para darte de bruces con Galway en estado puro: sus músicos al son celta, sus tiendas con jerséis de lana de ovejas de las islas Aran y sus pubs con la más auténtica Guinness que podrás probar jamás.

Ambiente nocturno en Galway
El hotel es muchísimo más grande de lo que puede parecer desde fuera, y es que una vez arriba (tiene varias plantas), se distribuye en laberínticos pasillos que te alejan del barullo de la ciudad.
Nuestra habitación tenía una cama de matrimonio y una individual y era bastante amplia y acogedora, la verdad es que daba gusto entrar y encontrártela súper calentita porque en la calle hacía un frío que pela.

Habitación Hotel Imperial de Galway
El baño estaba decorado en madera, lo que acompañaba a ese estilo rústico que envolvía la habitación.

Baño del Hotel Imperial de Galway
Para desayunar no tuve dudas: mi buena taza de café (lo siento, fui infiel al té) y varias tostadas de pan de soda (el típico irlandés) con mantequilla. Es algo muy simple, pero en España es imposible de encontrar este pan hecho con bicarbonato, así que aproveché y abandoné los dulces, las frutas, los cereales y demás surtidos que había en el buffet y me atiborré de delicioso soda bread.

Desayunando pan de soda en Irlanda
El hotel tiene un centro comercial justo al lado, y dentro podrás matar alguna hora muerta en Penneys (Primark). El barrio pesquero de Claddagh y la playa de Salthill están a apenas 15 minutos andando, y son lugares perfectos para relajarse lejos de la gente.

Playa de Salthill en Galway
El precio de la habitación en el Hotel Imperial en Galway ronda los 70 euros, así que es muy buena opción teniendo en cuenta su ubicación súper céntrica.
El mercado de Navidad de Galway
Una cosa que no he comentado es que el mercadillo navideño de Galway se instala justamente en Eyre Square, por lo que está ante las puertas del hotel, y de hecho se puede apreciar perfectamente desde sus ventanas.

Vistas del mercado de navidad de Galway
Mi habitación daba hacia el interior, pero pude pasearme por sus salones para deleitarme viendo a los niños emocionados hacer cola para conocer a Papá Noel, mayores bebiendo vino caliente y gente paseando arriba y abajo con bolsas de regalos navideños.
Pero el ambiente navideño no sólo se encuentra en su mercadillo. Empapa toda la ciudad y fue algo que sorprendió a Lucía… Los pubs están llenos de gente con jerséis con motivos navideños, las tiendas y locales rebosan de motivos típicos de estas fechas, y la gente destila espíritu navideño. Las iglesias como no podía ser de otra forma también se incluyen en la tradición y nosotras pudimos disfrutar del ambiente en la iglesia de St. Nicholas, que contaba con un mercadillo solidario en su interior al abrigo del fresquete, con un coro de villancicos e ¡incluso con una cafetería en su interior!

Villancicos de navidad en la iglesia de San Nicolás
Galway es un lugar mágico y este alojamiento te permitirá empaparte de esa esencia como si fueses un irlandés más.

Puerto de Galway con casas de colores