Alentada por las buenas críticas que había leído sobre este restaurante de comida holandesa casera en Ámsterdam (calle Rozengracht nº251), decidí cenar en él una noche y se convirtió en mi favorito.

Aprovecho para dejar por aquí mis imprescindibles que visitar en Ámsterdam, especialmente si vas de viaje la primera vez.
No está situado en pleno centro por lo que no es el típico para turistas, sino para holandeses, así que es perfecto, aunque cada día se está haciendo más y más popular.
«Moeders» significa «Madres», y su nombre no es casualidad: con su comida pretende trasladarte a la cocina de cada madre holandesa, con platos caseros, sabrosos y tradicionales.

Restaurante Moeders en Ámsterdam: comida de madres
Su decoración es de lo más curiosa, ya que tiene las paredes repletas de fotos que los comensales han ido llevando de sus madres, hasta el punto de que no queda un hueco libre, es súper retro y entrañable.

Además, cada plato y cada vaso es (nunca mejor dicho) de su padre y de su madre, no casan en absoluto, porque en la apertura cada uno llevó los suyos y ya se quedó así.

El día de las madres montan una megafiesta, y si es el cumple de tu madre le cantan y le regalan tarta, así que sólo tienes que advertirlo :P.
Un consejo es reservar, porque suele estar repleto.

Hay menús en los que eliges un entrante, un plato principal y un postre y los precios van de 26-30 euros según el segundo que elijas. Aún así es muchísima comida, por lo que recomiendo compartir o pedir algún menú y un plato suelto.
Qué pedir en el restaurante Moeders, platos holandeses
Nosotros tomamos:
- Para empezar nos sirvieron nuestra cesta de pan con hummus.
- Ensalada de la huerta, con tomate, pepino, pimiento amarillo, cebolla roja, albahaca, manzana, anchoas, croutons de pan y salsa con miel.
- Sopa del día, que era de tomate.
- Crema de guisantes, un plato muy típico de Holanda.
- «Small Egg in the Meadow«: este plato es una especie de cazuela hecha con batatas, espinacas, mozzarella, cebolla caramelizada y un huevo cuajado con salsa vinagreta. Una combinación arriesgada, muy original.



Una cosa muy graciosa que me pasó es que el camarero que nos atendía era igualito que Theon Greyjoy de Juego de Tronos, y estaba mirando una foto con el móvil charlando en la mesa cuando llegó y de refilón debió verlo (aunque intenté apagarlo rápido) porque dijo «oh, si soy yo» y ya estuvimos bromeando con su parecido el resto de la cena.

Moeders es una opción cien por cien recomendable para comer en Ámsterdam, me encanta. Si buscas un restaurante de comida holandesa, es tu lugar.