Qué ver en Le Marais, uno de los barrios más auténticos y bohemios de París. Está situado en los distritos III y IV, y podríamos decir que sus límites son: el Centro Pompidou, el río Sena, Republique y Bastille. Recorrerlo con esta ruta por Le Marais es alejarse de las hordas de turistas para adentrarse en el París más cosmopolita, entre jardines, desconocidos edificios históricos y cafés con glamour. Un plan perfecto.
Yo os voy a contar los lugares más importantes que visitar en Le Marais, y un buen puñado de curiosidades y recomendaciones que conocí gracias a una simpática guía afincada en París. Conocer el barrio a través de sus ojos me encantó.
Creo que la zona de Le Marais es un lugar perfecto para alojarse en París (aquí os dejo mis áreas preferidas para dormir). Este en la Place des Vosges no me puede gustar más.
Ya sabéis que soy una enamorada de París y que he viajado a ella al menos una docena de veces, así que es obligatorio que te leas mi guía con todos los rincones mágicos de París.
Ruta por Le Marais en París y sitios principales que visitar
Un pelín de la historia del barrio: origen de Le Marais
El nacimiento del barrio de Le Marais data de la época de los templarios. Este ejército de hijos de nobles se asentó en esta zona de París que por aquel entonces era terreno pantanoso (literalmente) y fueron sus primeros habitantes; de hecho incluso plantaron los primeros huertos y zonas de agricultura.
Además, crearon un primer Banco de Depósitos, al que llegó a pedir dinero ni más ni menos que el Rey Felipe el Hermoso. Los templarios, que no eran muy amigos ni de la Corona ni de la Iglesia no le hicieron mucho caso y este mandó quemarlos en la Isla de la Cité (donde está Notre Dame), recayendo sobre el Papa y el propio Rey una maldición que dicen hizo que muriesen ambos poco tiempo después.
Hoy día no quedan vestigios de los templarios que ver en Le Marais, sin embargo, desde su estancia este barrio ha permanecido poblado de forma constante por diferentes culturas, pasando por burgueses, una importante comunidad judía, y así hasta la actualidad.
Monumentos de Le Marais y qué no te puedes perder
Los Hotels Particuliers y sus preciosos jardines
En Le Marais abundan los hotels particuliers, que vienen a ser suntuosas casas palaciegas urbanas que han pertenecido a familias nobles y que hoy ocupan desde sedes judiciales a centros culturales. Fuera aparte su majestuosidad, merece la pena detenerse también en sus jardines, muy coquetos y tranquilos. No es raro ver en ellos a propios parisinos leyendo un libro.
Quizás el hotel particulier más conocido que visitar en Le Marais es el Hotel de Sully, de estilo renacentista manierista, que conecta secretamente con una esquina de la imponente Place des Vosgues y sus característicos ladrillos rojos (en ella está la casa de Víctor Hugo; fíjate en los ladrillos de las casas, algunos no son auténticos).
No obstante, hay otros muchos hotels particuliers con los que dejarse encandilar en Le Marais, como el Hotel des Sens que parece un pequeño castillo, el Hotel de Beauvais que perteneció a Catherine Bellier y hoy día es la sede de la Cámara de Apelación, o la biblioteca Forney. También destaca el caserón que hoy ocupan los Archivos Nacionales.
La judería parisina se oculta en Le Marais
Durante la segunda guerra mundial el barrio de Le Marais tuvo cierto triste protagonismo en París porque en él residían la mayoría de los judíos de la ciudad, provenientes de los países del este durante el periodo de entreguerras.
Muchos niños no obstante, se salvaron gracias a la actuación de un maestro, Migneret, que se empeñó en salvar a tantos judíos como le fuese posible, y consiguió esconder y reconducir a muchos de sus alumnos.
Hoy día Le Marais es el punto de mayor concentración de población judía en Europa, y no es raro ver por sus calles a señores y jóvenes portando la kipá. La arteria principal del Marais judío es la calle Rosiers.
Galerías de arte y tiendas de moda muy estilosas
En torno al Marais se ha asentado un estilo de comercio con aires alternativos no reñido con el de marcas con una reputación ya muy reconocida, que han hecho de este barrio un punto importante de moda en la ciudad de París (que a su vez es sede de lo fashion a nivel mundial).
Además, en toda esta zona hay innumerables galerías de arte contemporáneo, de arte rabioso, muy chulas y extremadamente originales, con todo tipo de excentricidades, rozando algunas lo esperpéntico.
Por supuesto, en esta amalgama queda espacio para el arte callejero, por eso es común tropezarse con obras de conocidos artistas urbanos. También es curioso en esta ruta por Le Marais descubrir los invaders, esos dibujos hechos con azulejos que se colocan en algunas fachadas de forma clandestina (y que están suponiendo un problema porque algunas personas los roban, ya que se llegan a vender hasta por veinte mil euros).
Otras curiosidades de Le Marais que no salen en las guías
Casas entramadas: pueden pasar desapercibidas pero son muy curiosas las casas de madera estilo Tudor que aún se conservan. Muchas de ellas fueron encaladas pero se han limpiado posteriormente para que se aprecie su estado original. Es muy gracioso ver que las construcciones son algo «panzudas» (también algunas casas de piedra). Esto es debido a que el precio de las construcciones dependía de los metros de suelo, por eso se iban ensanchando en los pisos intermedios y volvían a afinarse en las plantas superiores para dar al edificio cierta estabilidad. Me parece súper gracioso.
Si te flipan las casas entramadas tanto como a mí tienes que viajar a la Alsacia o a ciudades como Vannes o Rennes en la Bretaña Francesa.
Iglesias de Le Marais: en cuanto iglesias, destacan la de San Gervasio y sobre todo la de San Paul, que tiene acceso por la calle principal pero también por un pequeño callejón que conecta con una serie de callejuelas intrincadas que se conocen como village de San Paul, con casitas, pequeños jardines, cafés y tienditas. En la iglesia de San Paul cuelga un cuadro de Delacroix.
Dónde comer en Le Marais para chuparse los dedos
Las opciones son innumerables, pero voy a destacar la oferta culinaria que más ha llamado mi atención después de haber dado buena cuenta de ella:
- Para comer el mejor falafel del mundo espera la cola de L’as du falafel.
- Si prefieres la típica galette bretona tu lugar es el Café Breizh.
- Para un dulce, la prestigiosa pastelería Yann Couvreur.
- Si lo que quieres es ir picando de aquí y de allá, pásate por el mercado de comida internacional Marché des Enfants Rouges.
- Por último, para probar un auténtico taco mexicano y descubrir un pub secreto, come en La Candelaria.
¿Te ha gustado mi ruta con todo lo que ver en Le Marais? Lo mejor del recorrido es dejarse llevar para descubrir rincones secretos (de los que yo nunca me había percatado). Te va a encantar, estoy segura.
14 Comentarios
«Los templarios, que no eran muy amigos ni de la Corona ni de la Iglesia… » dices más arriba. Hombre, amigos de la corona no es que lo fueran mucho, básicamente por lo que representaba en términos de conspiraciones y corruptelas. Pero afirmar que no eran amigos de la iglesia…Entérate que eran el ejército de esta. Y como tal, sólo recibían órdenes directas del papa. Un saludo
Reviso.
Muchas gracias por todas las recomendaciones. Super completo y de gran ayuda!!:)
A ti por leerme 😀
No tienes un mapa del recorrido? Seria de gran ayuda
Tomo nota para hacerlo en cuanto tenga un ratín.
Hola! Super completo el post sobre uno de nuestros barrios favoritos de la ciudad. La verdad que París tiene barrios y rincones increíbles. Gracias por la recomendación del sitio de los fallafel. Nos encantan! Ya tenemos sitio para probarlos en nuestra próxima visita a la ciudad.
Súper recomendable!!
Muchas gracias Caludia, por evocarme lo vivido hace muuchos años en una calle -rue de la Colombe- . Un recuerdo muy feliz.
Coincido contigo, Le Marais también és mi barrio preferido. Un beso.
Joyeux Noël pa’ todos
Me alegro muchísimo! Feliz Navidad!!
Hola me encantó!!espero el mapa de recorrido ☺️😅
Muchas gracias 🙂
Hemos visitado este barrio gracias a tu post, es magnífico y tienes toda la razón del mundo… es un sitio ideal para vivir.
Coincidimos!!